INTROITO
E |
ste libro tiene como objetivo elevar los significantes para el dominio del lengua al ir trazando lo inverosímil en cada versos.
Además es encuadrar el dolor por la consecución del devenir de los años, cosa que este poemario así lo muestra, y todo se envuelve en la rebeldía iconoclasta de la supremacía sobre el lenguaje, que es algo tan manifestante, ya que todos los poemas tratan de guiarse a una fuerza o debilidad conforme a los trazos hechos por un buen pintor de emociones.
También trazo 0-17 persigue una expresión renovada, la meta es casi lograda, algo se consigue conforme a lo prometido, pues se dirá que hay cosas muy loables en la entrega de esta obra.
Trazo 0-17
Ahora los colores
¡como convulsiona y atiza el rostro!
Y si se toma dirección:
Aquí estoy.
Para usted,
sociedad de astucia y solicitud
donde la ralea se volatiza
para yacer en el ato.
¡Trazo!
¡A paso!
¡El 17!
¡El sueño!
¡El de los dos!
Yo aquí y ¿tú?
Una reminiscencia,
donde llegas a danzar pa' mis ojos
oh, bella silueta tenaz sin color.
Yo, presentando cantos ralos
a lo fulgurante para las vistas
que así saborean:
mi consciencia
la que maltrato tanto
y es motivo de animadversión.
8 diciembre 2016
Mi amada Define
Mi gran labor pletórica
¿causaría algún rencor u atisbo?
Y yo les digo: «eso me dejó»,
y no son meras alabanzas de terror
pues, tengo la salvación de no caer
en el infierno, pues, si lo hago
habrá una revolución, donde haré,
sin dudas, abdicar a Satanás
o a sus retruenos bestiales
ya que en compañía de ángeles
no quiero estar, ni por sus bocas frescas,
y en lo análoga la sucesión se retrocede.
Y si la belleza, añado,
es muy inalcanzable
es por verter lo incorrecto
en la correspondencia,
al no lamer la imagen dulce
donde sucumbirá mi destino.
Por sí se resiente y no comprende
por no tomarla, le envío un furtivo beso
aquel que me rechazó en la víspera
al encuentro no comprometido
y faltan pocos días para diciembre
y su imagen se encuentra sin razón
y a la par solo leo esquistos tontos
dejados por unos bardos en in situ,
(es mejor atragantarse de injurias);
y así me lo paso con la militante disciplina,
ya que siempre hablo de un rencor sinigual
provocado por el destino de su boca.
Más que caderas en resueno
donde aspiro seducción en su encuentro.
¡No se da!
¡Dónde te fuiste!
¡Se acerca primero!
Y diciembre me parece brutal...
*
«Sí no demuestro estar abierto
por lo que argumento»
Si al mostrarme tal como soy
no se sugiere mucho abasto
entonces me veré obligado
a reubicarme y buscar alcance,
pero, no se dice nada del asunto
de mi gritar a contra mar
donde solo ataque sin cesar
preferentemente para ser el válido
ya que, al reunificar mi existencia
de atar el amor y odio
por el eufemismo de triunfar;
por tanto, estar aparte del arte
no rompería mi estigma
ni la consciencia del respeto mutuo;
pues, mostraré lo cobarde a esteras
por estar llena de soberbias;
solo comprenderé luchar
lo que se conlleva a tener alma
porque nadie bosteza sin calma,
y si así con soberbio gesticulo
con estas miles de palabras
que no constituye ni un recuerdo;
luego de cada valorar de sí mismo
uno se obliga a interconectarse
así entre los estudios internos;
y validaré en la pos-tarea
en lo que se cabalga y arrea
para someter lo de esta era,
y si me obligan a ser báscula
al pesar la ternura, el olvidar y la tolerancia
¿de pasar estos versos soberbios?,
que conjuga con lo mío siempre
¡esto es una batalla incierta!,
comenzada hace tanto tiempo
donde no se da cabida a la rendición.
Control de Natalidad
Se me escapan de la mente
para convertirse en aliento bruno,
se me pasan y tengo que vestirlos:
de mucha honorabilidad,
pero también hay que constituirle su desborde.
¿Y son malos? ¡Alcanzarán notoriedad!
¿Qué justeza hay? Solo represión.
Para que no salgan iguales yo rezo
lo cabal es no obtener consecución
para así no maniatar mi mente
pues que afloren amor no quiero
pero me son esquivos y ruin
ya que solo llevan peste roja y rara tara;
y si invierten atención en este sacro «neonema»
sufrirán de más palabras raras
y al caminar sobre la consciencia
nunca pares, sigue y crece,
ya que, a veces llegan a reproducirse
como no, y alcanzan cierta admiración.
Cansado del esparcimiento
y de la indeseada noche incestuosa
se repite y procrea: aberración.
¿Y ni una canción?
Solo meros soliloquios
hechas en las nubes sin razón
donde se cobija: ¡mis hijos!,
que son estos versos contra operativas
y apurativas yacen inválidos
por el oscuro rencor que sale
y sueñan con una cadencia
en la arre-curva-altura
sí, eso mismos quejidos tienen:
la del latido, con una métrica soberana
y de eso me puedo ufanar
ser tan subversivos,
y esa lección han aprendido
al estar embebido de los conceptos,
ya que se lanzan con arrojo
con esa bonita forma de congraciarse
en esos vientos poéticos
que mucho abunda por estos tiempos.
*
Fruta ataviada
¡circunstancia análoga!
que deviene tristeza.
Boca húmeda
cabello resuelto
el tesón ineludible.
Facha extraordinaria,
ilusión perfecta,
aún es un sueño.
Sueño con aquella
en pos del hilo,
¿y no es una rememoración?
Es solo ubicar mi ser
en la soledad esculpida
a punta de trazos.
Es acallar y recordar
lo furtiva que era
cuando alela el subconsciente.
Apenas recorro
nuestro ubicar
en el coetáneo aliento.
A caso es un cuento
jugada en pos del tiempo.
Sigo andando
con un ritmo sonoro
procurando estar listo
a tan cierta ilusión
ocurrida en la mente.
Inevitable es acabar todo
y precisar lo ausente.
*
¿Dónde estás?
¿Por qué te fugaste?
Quizás lo hiciste para obviar
lo más desagradable de mí;
y renací con tu perdida.
¡Aquí estoy!,
pasando un transliterar
acatando el ton
siendo vulnerable en la cohesión;
pues sigo en la plenitud
para obtener salvación.
¿Por dónde andas?
¿En la penumbra con otros?,
sollozando el perseguimiento;
pienso en el empate alterno
y te diré: ¡ya no soy aquel!
Si estás con vida, cuéntame,
así en retroceso tus horas,
hasta aquél momento de la ruptura,
donde ahí juntos estuvimos
siempre hago esto en mi mente
para elucubrar algún bienestar.
Y sé que el acoso te hizo sentir temor,
pues, quería salvación de vos
mas, sofocación obtuve de ti
hasta sentir hastío de mi yo.
Tú, seguirás con el radiante semblante
aquel que me enamoré
y juré jocoso nunca perder.
Y diciembre corre y a la postre
con este nuevo año solo me asegura
un desequilibrio que se me está dando
por lo sucedido hace tantos años.
*
Hay cierta angustia
al sopesar la soledad.
Cierta ambivalencia
al enfrentarse al tedio.
Recuerdo la imagen tuya
donde tu mirada se fijaba en la mía,
tedio y soledad causó
por la forma de mí proceder.
Sé que me comporte mal
y merezco hundirme en el asco.
Pero, someto las inquietudes:
¿Por qué me olvidaste?
¿Dónde estarás que no te encuentro?
Hay rencores inigualables
que duran para siempre
u ineptitudes que se eximen rápido,
¿pero lo mío debe ser para la eternidad?
Sí, estoy de acuerdo aguantar
la penitencia del olvido
violentar el sentido, al solo ser,
mezquino con los sentimientos.
Hay ciertas emociones
que se siente muy profundas
y como buen humano,
respirarlas tranquilas debo.
*
¿Y si la incumbencia irrumpe el margen
es que no están atento al desborde?
¡De mencionar tu detallado sabor!
A los colores me someto,
y mi destino es la desolación,
pues, hay un enorme resentimiento
cuando se obstruye el color
siendo un estruendo para los ciegos.
La similitud de tensión las hay
en el arco de la plena enjundia
al derrochar candor en la luminiscencia
aunada de los inmensos colores.
Ataviado de mostrar mi dicha
al absorber el claro don de mis versos
que preocupan mucho el contenido
donde acecho y califico la tensión.
Pero terminan por someterse al orden
y atenta siempre el oscuro sentir
y los demás ni comentan los hechos.
*
Siempre buscar el estruendoso aplauso
será como someterse a los estragos.
Y mis conceptos denostará ese amor
por eso, esos versos salen de mi mente
siempre fríos, incisivos o áspero
sí, también abiertos llenos de inquietud.
Por su entendimiento
sufren en el exterior
por su comprensión.
No soy nuevo en el querer,
ya que son una década
orillado a brindarlos a ratos.
Y si hay sufrimiento
es por procrear lo santo,
entonces, les dejaré un teorema...
Deben conseguir el estilo
de arquitectónicas bases de pistilos
al ser no ser oblicuos y obitorios.
Hablan de escasos temas,
pero entre el ego uno va
aparentando reconocerse.
Como saber si disgusta,
si a la primera huyen del hueco,
¿tendrán saborearse
para después degustarlo?
En el sentido del tiempo
yo, solo contra el viento,
y mi sentido es puerco.
Y en el sentido más pleno
la ceguera empieza,
pues, si estoy de pie,
es por la sorpresa del público.
*
Una fuerza no me permite
retroceder y dejar de no verla
pero veo su rostro y sigo adelante
aunque fuerce el ánimo
y trate de inmovilizarme
con lo certero y compasivo;
sé que al ensañarme así
no podré levantarme jamás.
Pero sigo mi imagen a oscuras
al demostrar un gran tesón
para no caer por amor a las puras.
Sé que la atracción
procura en lo unísono:
un latido ferviente,
la complacencia absoluta
al no haber ni un error.
Sé que como humano imperfecto
yazgo en tensión y proclive estoy:
a destruir alabanzas,
a romper sin razón,
provocar algún rencor.
No sé si podré aceptar o contener
el aullido incesante del deseo,
pues, a la vera del besar y sentir
tengo así la misión de obtener la sandez
por eso, canto siempre hasta el alba
para no dañar su bello y preclaro rostro.
Y si al mancharme por lo sucedido
tendría que sufrir alguna obstinación
bien merecido me lo tengo
por amarte y desvalorarte
sufriré este cruento rencor;
y si al desviar la mirada me ve
tendré en cuenta que solo quise:
obtener su salvación.