Epílogo
Los haikus son estructuras poéticas de corte minimalista, sus expresiones se basan en concretar el mensaje de forma efectiva a través de la poesía, para encontrarnos en el punto de interés.
Ahora bien, desde el más pequeño e insignificante insecto o recurso faunístico será aquí poetizados, esta acción conduce a esa filosofía de rescate de las especies y su medio, porque nadie aprecie algo si no lo conoce.
En esta obra uno acaba de verificar la herencia perdurable de la cultura oriental, sin alejarse mucho de la estética propia y profundidad del escritor.
Con atención a lo mínimo, ese que mueve al mundo, estos seres cumplen una función casi imperceptible con una repercusión diaria, y esta obra se revela más que su importancia, no destruir esa extraña convivencia que da renovación a nuestra equivalente vidas.
Afanado lector, usted será testigo de lo que necesitamos es conocer más de lo natural al darle a nuestra consciencia una poesía que sirve para eso.
Es una garza
con su túnica blanca
que mira el agua,
《¡seres acuáticos
te ven desde los cielos
como profana!》,
-¡ángel de muerte!,
la confunden los peces
cuando esta acecha;
por un momento
el hambre de las aves
rompe la calma.
*
Entre las plantas
el botón de colores
en su labores,
Es bella esfera
con pintitas variadas
aleja plagas,
como alterada,
la recoge la infanta
le da su honores,
es tan orgánica
le molesta los tóxicos
porque morimos.
*
Natural tren
muy bien acorazado
sale de roca,
es segmentado
tiene patitas cortas
no se desboca,
con sus antenas
y su mandibulilla
recorre villas,
lleva en su lomo
pizca del polvo dulce
de sus parajes,
conoce a muchos
entre ellas a la oruga
y la cifela.
